La abogada Meghan Melo, de nuestra oficina, escribió una columna para el periódico Qué Pasa, acerca del robo de salario.

“En Estados Unidos la mayoría de los trabajadores, a menos de que se les pague con propinas, deben de ganar un mínimo de $7.25 por hora por el trabajo hecho durante la semana. Esto debe suceder sin importar si al trabajador le pagan por hora, por unidad, o por producción. Todos los trabajadores, sin importar su estatus migratorio, tienen el derecho a ganar un salario mínimo.”

Lea la columna aquí.